Concejal Carlos Castro Romero: en Linares seguimos pegados en la pandemia de acuerdo a resultados de SIMCE 2023

Por Carlos Castro Romero (profesor y concejal por la Municipalidad de Linares)

                 Ha sido una grata sorpresa la celeridad con la que la Agencia de Calidad de la Educación ha puesto a disposición a inicios del este año escolar 2024, los resultados de la medición del SIMCE 2023. Esta pronta entrega de información, permite tomar estos datos como insumos para la reflexión y planificación del sistema educativo y así poner el foco en la mejora de los aprendizajes.

En el plano nacional aparecen las primeras señales de recuperación de aprendizajes después de los efectos tan negativos que provocó el período de pandemia y el consiguiente cierre de los establecimientos educacionales, que dio paso a un modelo de educación a distancia para el cual no estábamos preparados.

El año escolar 2022 inició el regreso a presencialidad en todo el país, esto con el ánimo de recuperar confianza en las comunidades escolares para reimpulsar el trabajo en las aulas. En Linares, extrañamente nuestra máxima autoridad municipal dio la señal contraria a las directrices emanadas del Ministerio de Educación, pues le traspasó a las familias la decisión de enviar o no a los estudiantes del nivel básico a la escuela, situación que, obviamente, retrasó en nuestra comuna el retorno a clases presenciales, en circunstancias que el convencimiento general apuntaba a que la mejor garantía de lograr aprendizajes era en la escuela.

Según los resultados del SIMCE 2023, la comuna de Linares aun no logra despegarse de las secuelas de la pandemia, esto debido a que los resultados de los aprendizajes no han alcanzado el mismo ritmo que está mostrando el sistema en sus niveles regionales y nacionales. 

Si bien los promedios no entregan la información completa, es de preocupación que, frente a la remontada que se exhibe en la región y en el país, la educación básica del sistema municipal de Linares no se está recuperando en relación al año 2022. Respecto de las pruebas de 4° Básico, nos encontramos 17 puntos por debajo de la media nacional y regional y en la medición de II medio nos situamos 10 puntos abajo.

En los datos más específicos, la preocupación principal está en el área de Lenguaje y Comunicación, la que en el nivel nacional si bien no tuvo una gran recuperación se mostró en esa dirección, sin embargo, en la Educación Básica linarense el avance fue cero, no se movió la aguja.

El resto de los establecimientos subvencionados de la comuna tampoco tienen muchas cuentas alegres que sacar en estas mediciones, lo que nos desafía a todos los actores a tomarnos la educación como prioridad y la recuperación de aprendizajes como urgencia. Esto implica trabajos colaborativos que muchas veces cuesta implementar, porque cada quien quiere defender su propia parcela, pero desde una mirada más holística y responsable con el entorno podemos asumir mejoras en conjunto, pensando en los beneficiarios que realmente importan: los y las estudiantes y por añadidura la comuna.

El trabajo en equipo sigue siendo la clave y en este aspecto, es bueno destacar ciertos equipos escolares que han ido consolidando tendencias en sus resultados SIMCE, como el caso de la Escuela Uno Isabel Riquelme, la Escuela España, Escuela Ramón Belmar y la Escuela Salomón Salman. Por otro lado, también es importante destacar la remontada en sus resultados de la Escuela Presidente Carlos Ibáñez del Campo y de la Escuela Graciela Letelier, escuelas que,  seguramente, tendrán entre sus propósitos seguir avanzando en este aspecto académico.

Como lo planteamos en un comienzo, los resultados puestos a disposición a principio del año escolar, permitirán transformar esta información en herramienta de trabajo, de tal manera que la reflexión y la toma de decisiones oportunas pueda hacer la diferencia para mejorar. 

En este sentido y dentro de la planificación de acciones, como sistema escolar debemos incentivar la revinculación y asistencia del estudiantado, trabajar los buenos climas escolares, fortalecer el trabajo de equipo e involucrar a los distintos actores de las comunidades, empezando por el Consejo Escolar. 

Desde la Comisión de educación hemos sugerido a la dirección del DAEM que estudie alternativas para incentivar la asistencia del estudiantado a nuestros colegios, también solicitamos a los Consejos Escolares puedan poner en tabla la discusión respecto de las normas y protocolos escolares para salidas de estudiantes en sus horas de colación, así como iniciar el debate respecto del uso de teléfonos móviles en el establecimiento.

La educación municipal de nuestra comuna, además de todos los problemas financieros que enfrenta, está teniendo malos resultados académicos, de tal forma  que esta administración deja un legado de ocho años de deterioro permanente del sistema escolar, en una lógica de convertirla en bolsa de empleos más que en verdadero compromiso con el desarrollo de la comunidad.

Es tiempo de que los distintos actores de las comunidades educativas empujemos proyectos escolares comprometidos con los aprendizajes y el desarrollo integral, porque la escuela debiera ser un espacio adecuado para pasarlo bien y aprender.

(El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de Séptima Página Noticias).