Por Eduardo de la Fuente Ceroni (ingeniero civil electricista PUC)
Mucho se discute actualmente en Chile, y en ciertos círculos de opinión influyente, sobre la realidad política de la Federación Rusa que encabeza Vladimir Putin. Más de algunos aún creen que Rusia es comunista, pero nada más lejos de la realidad.
La Federación Rusa (FR) tiene un órgano legislativo compuesto de dos cámaras: el Consejo de la FR y la más que tradicional Duma del estado ruso.
El partido que domina ampliamente ambos estamentos es precisamente el de Putin, Rusia Unida, partido que abarca prácticamente todo el espectro de una derecha muy conservadora, nacionalista y populista.
El Consejo está constituído por 170 miembros, de los cuales 142 son de Rusia Unida, es decir prácticamente el 84% del Consejo es favorable a Putin; mientras en la oposición sólo hay 4 del Partido Comunista, 4 de Rusia Justa (social demócrata) y 4 Liberales. Es decir, el PC ruso tradicional es solamente algo más del 2% del Consejo de la FR.
La Duma, constituída por 450 diputados, tiene 324 escaños de Rusia Unida, 72%, los que apoyan sin contrapeso a Putin porque en su oposición sólo hay 57 comunistas, 27 social demócratas y 21 liberales.
Con lo expuesto, ¿alguien podría sostener o creer que Rusia es aún comunista?
Por lo tanto, la ponencia del Presidente Boric en Europa respecto de Rusia, desde el punto de vista de una centroizquierda informada, resulta totalmente acertada.
Lo que no me parece muy acertado, sin embargo, es que nuestro presidente se haya mostrado tan cercano a Zelensky, que encabeza un gobierno de derecha abiertamente neoliberal y populista, en lugar de haber adoptado una posición más prudente, como Colombia e incluso El Vaticano. Entiendo, eso si, que en su ponencia hay un potente foco geopolítico con respecto a una invasión que pretende apropiarse de territorios ajenos, tenemos un vecino con permanentes ambiciones al respecto, quizá eso fue lo que tuvo en mente Boric.