Marta Zúñiga la artesana que le da vida a las hojas de choclo
Se declara artesana de nacimiento, ya que heredó este oficio de sus padres, tíos y abuelo, aunque nunca, hasta ahora, se había dedicado de lleno a desarrollar su talento. “Esto es lo mío, es lo que me llena. Yo me siento a trabajar y voy haciendo lo que nace en el momento. No son cosas que se repitan, son piezas únicas que van surgiendo a medida que comienzo a realizarlas”, indica Marta.
Marta Zúñiga González es una artesana usuaria del Programa de Desarrollo Local (Prodesal) de INDAP en Villa Alegre, Región del Maule, que quiere darle una segunda oportunidad a los desechos del choclo, rescatando y preservando las hojas que envuelven las mazorcas para convertirlas en delicadas piezas decorativas.
Se declara artesana de nacimiento, ya que heredó este oficio de sus padres, tíos y abuelo, aunque nunca, hasta ahora, se había dedicado de lleno a desarrollar su talento. “Esto es lo mío, es lo que me llena. Yo me siento a trabajar y voy haciendo lo que nace en el momento. No son cosas que se repitan, son piezas únicas que van surgiendo a medida que comienzo a realizarlas”, indica Marta.
Sus trabajos son principalmente arreglos florales, canastos, pinches para el pelo, muñequitas de la abundancia y, en esta época del año, coronas, portavelas y pesebres o nacimientos.
La creación de un nacimiento es siempre un proceso único, nunca una pieza se repite y requiere de varios días de trabajo para que el resultado sea firme y duradero: “En hacer un pesebre me demoro cuatro días, porque hay que ir por etapas, por capas, para que vaya secando, tenga firmeza y dure en el tiempo. Los colores se los doy a las hojas con productos naturales, como por ejemplo cebolla, hojas de durazno y naranjo, cenizas, todo muy natural, pero también uso algunas tinturas como las que emplean las artesanas de Rari para el crin, que se mantienen en el tiempo y no destiñen.”
Marta presentó su arte campesino en la última ExpoMundoRural Maule y en la Feria del Folclor de Huilquilemu, donde los asistentes destacaron la belleza, finas terminaciones y gran variedad de sus creaciones, entre las que también se cuentan candelabros que hace con troncos de caprichosas formas que recolecta en los ríos y en la cordillera maulina, para hacer que cada trabajo sea especial y diferente.