Lenin Fuentes Barros: “La tozudez ideológica del Gobierno”

Lenin Fuentes Barros: “La tozudez ideológica del Gobierno”
Lenin Fuentes Barros, trabajador social.

Desde las organizaciones que conforman el Comando Chile Digno, seguiremos exigiendo  se fije una renta pandémica asegurada para todos l@s trabajador@s que han perdido su fuente laboral, la que no puede ser inferior al sueldo mínimo. Las estadísticas nos indican que 7,5 millones de personas en Chile sufrirán a partir del próximo mes la condición de pobreza, es decir, sin ingresos para solventar lo más básico, mientras el 1


Por Lenin Fuentes Barros (Coordinador Comando Apruebo Chile Digno Linares)

                                           El consenso en el mundo político de oposición, es que la negativa del gobierno a incrementar la ayuda a l@s trabajador@s es justificable sólo por una  sobre ideologización del primer mandatario y sus asesores, quienes no aceptan tocar el modelo neoliberal (a pesar de su rotundo fracaso en el mundo) y se justifica señalando que “estamos al límite del gasto fiscal”, lo que ha sido desmentido por reputados economistas nacionales (afines al modelo incluso la mayoría de ellos), quien con números en la mano han dicho que es posible aumentar los recursos para ir en ayuda de los aproximadamente 2 millones de cesantes que se espera para el mes de junio.

El gobierno ha copado la agenda informativa con el revés político en el parlamento en donde se le pidió más recursos para su propuesta de Ingreso Familiar de Emergencia, el que está destinado al 40% de la población más vulnerable,  a quienes  se le otorgaría una ayuda por tres meses con un aporte regresivo de 65 mil pesos el primer mes, 55 mil 250 el segundo y 45.500 el tercero. En resumen, un aporte de $165.750.

Si tomamos  el aporte que ofrece el gobierno y lo dividimos por 4 (promedio de los integrantes de la familia chilena), nos da un per cápita  aproximado de $41.500.  Humillante. No hay otra forma de calificarlo.

Esto fue rechazado por todos los partidos de oposición y en carta enviada al Presidente de la república se le solicita que eleve este monto al menos a $80.000 por cada integrante del grupo familiar como monto fijo, no regresivo y por el tiempo dure la pandemia en Chile, no solo por tres meses. La respuesta la conocimos el lunes 11 durante la tarde.  El gobierno ingresó su veto al proyecto original, manteniendo los mismos montos. Con esto y considerando que el parlamento no tiene facultada para modificar el proyecto en lo económico, se obliga a su aprobación y seguramente dicho proyecto será ley al momento que esta columna se publique.

Piñera y su equipo, se están asegurando que el costo de la crisis sea de cargo de los trabajadores y está blindando a los empresarios y súper ricos del país, evitando que éstos contribuyan a financiar la crisis. Recursos en este sector hay de sobras. Sólo el uno por ciento de los súper ricos en Chile acumulan el 33% de la riqueza y un mísero impuesto de 2% a su fortuna permitiría el financiamiento de esta y otras medidas tan necesarias para enfrentar el hambre que se avecina.

Al parecer, el contagio del covid-19 esta descontrolado y en  aumento sostenido. Las cuarentenas dinámicas no han resultado. No es posible pedirle a la gente que se quede en casa si no aseguramos que tenga lo mínimo para sobrevivir y esto no lo está  garantizando el gobierno, pudiendo hacerlo, ya que se cuenta con recursos de sobra tanto en ahorro como en inversión externa. Aun, ni siquiera es necesario endeudarse como país para dar solución a estas necesidades.

Las medidas del gobierno, llenas de “letra chica”, se hacen inviables para una gran mayoría y son excluyentes. Así tenemos que el 60% de las pequeñas empresas no recibirán aporte del Estado, ya que la banca las evalúa como de riesgo y obvio que lo son, ya que no cuentan con las abrumadoras ganancias que si tienen las grandes empresas que no han hecho más que aprovechar las franquicias que se le otorga desde el gobierno y no invierten ni un peso de sus utilidades en mantener los puestos de trabajo.

Desde las organizaciones que conforman el Comando Chile Digno, seguiremos exigiendo  se fije una renta pandémica asegurada para todos l@s trabajador@s que han perdido su fuente laboral, la que no puede ser inferior al sueldo mínimo. Las estadísticas nos indican que 7,5 millones de personas en Chile sufrirán a partir del próximo mes la condición de pobreza, es decir, sin ingresos para solventar lo más básico, mientras el 1% de los súper ricos siguen atesorando sus fortunas.

Frente a la indolencia del gobierno y de quien lo dirige, al parecer, no  quedan más alternativas,  aun con pandemia y estado de emergencia el pueblo deberá regresar a las calles a exigir lo que le es propio.

La nueva constitución es una necesidad de mayor urgencia.

 

(El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de Séptima Página Noticias).