Lenin Fuentes Barros: “El derecho a pensiones dignas”

Lenin Fuentes Barros: “El derecho a pensiones dignas”
Lenin Fuentes Barros, trabajador social.

La garantía de pensión mínima no significa universalidad o que será igual para tod@s,  sino solo que de ahí se parte, teniendo como principio que nadie se debería jubilar con una cifra inferior al 70


Lenin Fuentes Barros: (trabajador social, magíster en políticas públicas y gestión local y coordinador del Comando Apruebo Chile Digno Linares)

 

                       Tal como lo hemos señalado en distintos comentarios, la actual constitución política del Estado de Chile, se caracteriza por su trivialidad o superficialidad en cuanto a derechos sociales. Tal es el caso de la salud, la educación y de la seguridad social.

En el art. 19, numeral 18, la constitución pinochetistas en su alusión a la seguridad social, limita el rol del Estado a “supervigilar” el adecuado ejercicio del derecho a la seguridad social. Deja el tema en manos de privados y regido por leyes de quórum calificados.

Como es sabido, “Derechos sin garantías constitucionales son  letra muerta”. Lo terrible,  literalmente es que  los muertos y muertas son de carne y hueso y han vivido a nuestro lado. Son nuestras vecinas y vecinos adultos mayores que han vivido y viven la desidia del sistema, que los mira como despojo luego que han entregado su vida a la producción y desarrollo del país.

La seguridad social en el Chile de Pinochet y posteriormente de los demócratas neoliberales que administraron el modelo sin tocarle un ápice, es un negocio de grandes sumas de dineros. Así tenemos que el fondo de pensiones que administran las AFPs en Chile es superior al 70% de PIB del país.  Esta suma, que aportan los trabajadores es utilizada por los grupos económicos para rentar a tasas especulativas que luego se traducen en ganancia solo para los administradores y cero para el ahorrante forzoso.  Lo normal es que cuando la inversión resultó negativa, el ahorrante hace suya las perdidas.

Hoy, l@s chilen@s tenemos la oportunidad histórica de dar un vuelco a esta situación.  Si, ya que debemos exigir que el derecho a la seguridad social y en particular de las pensiones esté garantizado constitucionalmente. Chile cuenta con los recursos necesarios para que tod@s nuestr@s mayores al momento de retirarse de la vida laboral, puedan hacerlo en dignidad y no en pobreza extrema.

Lo dicho anteriormente, no son solo palabras de buenas intenciones, está demostrado técnicamente por estudios elaborados por distintos centros de estudios especializados en el tema de pensiones y aseguran pensiones dignas por al menos 100 años futuros (Fundación Sol, Fundación Cenda, entre otros).

Desde Apruebo Chile Digno, proponemos que la futura pensión no puede ser inferior a la renta básica garantizada que debe superar los 500 mil pesos. Esto debe estar asociado a otros derechos  como la salud, vivienda, movilización y recreación,  garantizado para tod@s nuestr@s mayores al momento que se retiren del mundo laboral. Insisto, esto no es una propuesta al aire, esto está respaldado técnicamente y se demuestra en cifras, asumiendo niveles de crecimiento muy bajos para el país.

Proponemos un sistema de pensiones públicas, tripartito, solidario y de reparto intergeneracional.

En primer lugar, debe ser público para asegurar que se deje de lucrar con los ahorros de l@s trabajadores. Esto solo se garantiza si una entidad estatal se hace cargo de la administración de estos recursos.

El sistema se nutrirá de los  aportes que realizarán el trabajador, el empleador y el Estado (Como en la mayoría de los países del mundo en donde el sistema de reparto está vigente y no como  pretenden hacernos creer que ha fracasado). Todo en un fondo común solidario, que debe garantizar pensiones mínimas, en donde los recursos de las generaciones menores complementan el de los que se están retirando de la vida activa laboral.

La garantía de pensión mínima no significa universalidad o que será igual para tod@s,  sino solo que de ahí se parte, teniendo como principio que nadie se debería jubilar con una cifra inferior al 70% de sus ingresos.

La decisión está literalmente en nuestras manos.

El 25 de octubre debemos Aprobar Nueva Constitución y Convención Constitucional para asegurar el derecho a pensiones dignas para tod@s  l@s chilen@s¡

 

 

(El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de Séptima Página Noticias).