Un país en campaña: ¿hacia el cambio o la resistencia?

Un país en campaña: ¿hacia el cambio o la resistencia?
Carla Alegría Vásquez, cientista política.

En las elecciones pasadas, muchos optaron por no aparecer públicamente con sus postulantes, evitando compromisos visibles. Sin embargo, la nueva normativa mantiene restricciones en el uso del espacio público y la distribución de material visual en medios y flyería


Por Carla Alegría Vásquez (cientista política, politóloga y experta en desarrollo organizacional y políticas públicas)    

            Chile se encamina hacia una de las elecciones presidenciales más inusuales de su historia reciente. Con más de 50 personas iniciando el proceso de recolección de firmas para postularse, el panorama refleja una fragmentación política sin precedentes. Este fenómeno, aunque pueda parecer novedoso en el país, no es ajeno a la experiencia internacional.

En Francia y Estados Unidos, por ejemplo, ha habido momentos en los que un aluvión de candidatos independientes o de partidos menores ha intentado desafiar a las estructuras tradicionales. Sin embargo, los sistemas electorales suelen filtrar a la mayoría antes de que lleguen a competir de manera efectiva.

A pesar de esta proliferación de aspirantes, Chile sigue siendo un país conservador en su estructura política. El estallido social de 2019 dejó al descubierto profundas demandas de cambio, pero las instituciones y el modelo económico han mostrado una notable resistencia a transformaciones radicales. Si bien el descontento que llevó a millones de personas a manifestarse sigue presente, las respuestas estructurales han sido limitadas. Esto ha generado un clima de desconfianza en la política tradicional y ha impulsado la aparición de nuevas candidaturas, muchas de ellas sin una propuesta clara de gobernabilidad.
En el ámbito local y regional, la carrera presidencial ya está dejando huellas. Los gobiernos locales y regionales, lejos de mantener una postura neutral, han comenzado a tomar partido por ciertos candidatos, especialmente en la carrera senatorial y en la presidencial. Esta inclinación anticipada refleja la tendencia chilena a buscar estabilidad dentro de sus propias redes de influencia, incluso cuando el escenario nacional parece más incierto que nunca.
En este contexto, será clave observar la postura que adopten los alcaldes de la provincia, como Jaime Briones Jorquera en Longaví, Jonathan Norambuena Barros en Yerbas Buenas, Pedro Pablo Muñoz en Colbún, Mario Meza Vásquez en Linares, Rafael Ramírez en Retiro, Jorge Silva en San Javier, Arturo Palma en Villa Alegre y Patricio Ojeda en Parral. También será fundamental analizar la estrategia de los partidos políticos y sus candidatos en el territorio.
En las elecciones pasadas, muchos optaron por no aparecer públicamente con sus postulantes, evitando compromisos visibles. Sin embargo, la nueva normativa mantiene restricciones en el uso del espacio público y la distribución de material visual en medios y flyería. En la última elección, varios candidatos desafiaron estas regulaciones y, aun así, lograron la victoria sin enfrentar sanciones significativas.
Las elecciones en Chile están reguladas principalmente por la Ley N° 18.700, sobre Votaciones Populares y Escrutinios, que establece el marco legal para la organización y ejecución de los procesos electorales. Otras normas clave incluyen la Ley N° 18.556, que regula el sistema de inscripción electoral y la actualización del padrón; la Ley N° 19.884, que establece transparencia, límites y control del gasto electoral; la Ley N° 18.603, que regula a los partidos políticos y su participación en elecciones; y la Constitución Política de Chile, que define los principios generales del sistema electoral y los requisitos para postular a cargos de elección popular.
El desafío para los candidatos a la presidencia no será solo conseguir las firmas necesarias para competir, sino también articular una propuesta que conecte con una ciudadanía que, aunque sigue demandando cambios, desconfía de los liderazgos improvisados. Así, más que un simple proceso electoral, esta elección será una prueba de fuego para la política chilena: ¿seguirá resistiendo los cambios o finalmente dará paso a una transformación real?.
(El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de Séptima Página Noticias).