Aniversario 227 de la ciudad de Linares: la urgencia de sepultar la maldición del cura “Somoza”
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Linares tiene y necesita más líderes de opinión. No puede ser que todo dependa del municipio. Dónde están los gremios profesionales, dónde están los sindicatos, dónde están el comercio organizado, dónde están los CFT y universidades, dónde están las organizaciones de base y dónde están las fundaciones, por mencionar a algunas articulaciones comunales.
Por César Hormazábal Villalobos (periodista de la Universidad de Santiago de Chile y director de Séptima Página Noticias)
La ciudad de Linares cumple hoy día 227 años de fundación, lo hace inserto dentro de la pandemia del Covid-19 y enfrentando múltiples desafíos en las más diversas áreas del quehacer humano, social y económico.
El municipio programó tres actividades puntuales y con aforo reducido (saludo protocolar a las autoridades, homenaje a los fundadores y entrega de la nueva biblioteca pública municipal). La idea es conmemorar y no “celebrar” debido al momento complejo del Coronavirus.
El aniversario se da, además, a una semana del proceso electoral que significó la reelección del abogado y militante RN, Mario Meza Vásquez como alcalde de la comuna. Una campaña marcada por el desprestigio, los ataques, el mal uso de las redes sociales y la falta de ideas.
Los problemas de los habitantes son diversos: falta de trabajo, bajos sueldos, mal estado de calles y veredas, seguridad ciudadana, alto consumo de drogas, escasa inversión pública y privada, conectividad vial y desarrollo académico.
Pero también hay tremendas oportunidades, principalmente en lo turístico (Santuario Achibueno y Reserva Los Bellotos) y en lo productivo. La comuna es potencia en materia de cultivos como arándanos y manzanas.
El gran desafío que nos impone este aniversario 227 es sepultar la famosa maldición del cura “Somoza”. Esa misma que habla de postergación y pobreza, y que nos ha perseguido por décadas. Una leyenda que en muchos aspectos se ha convertido en realidad.
Es deber de todos los ciudadanos, de sus líderes políticos, empresariales, eclesiásticos , profesionales, medios de comunicación y sector comunitario dar un giro de 360 grados en materia de mentalidad, disposición y de cómo enfrentar el devenir diario.
Nos merecemos una ciudad mejor, distinta y con debate propositivo. No sirven las denuncias en redes sociales y el “disparo” fácil de verdaderos “francotiradores” de Facebook. La obligación es ir a tribunales cuando exista duda razonable de eventual corrupción. Necesitamos instituciones como el Ministerio Público y sus organismos auxiliadores (PDI y Carabineros, principalmente) que den respuesta a casos policiales que están en la impunidad y donde hay indagaciones no formalizadas (muerte de Diego Vásquez e Ignacio Canales).
Necesitamos con urgencia un cambio de mentalidad. Se requiere de energía ganadora para sepultar el mito de “patio trasero” de la Región del Maule. No es posible seguir esperando por décadas obras como: el eje Carmen-Maipú-Januario Espinoza; los pasos a desnivel Matadero y Villa Camus; la ampliación de avenida Presidente Ibáñez; la creación de un balneario popular en el Achibueno; o la construcción del Cesfam “Oscar Bonilla”.
El cura “Somoza” tiene que dejar de existir en el subconsciente de los linarenses para empujar por una ciudad desarrollada, integradora, inclusiva y futurista. Se vienen desafíos tremendamente importantes post-pandemia.
Linares tiene y necesita más líderes de opinión. No puede ser que todo dependa del municipio. Dónde están los gremios profesionales, dónde están los sindicatos, dónde están el comercio organizado, dónde están los CFT y universidades, dónde están las organizaciones de base y dónde están las fundaciones, por mencionar a algunas articulaciones comunales.
¡¡¡La unión hace la fuerza!!!
