Parral reivindica la cueca del “Guatón Loyola”

“Según el relato de los testigos, en el casino del lugar tres varones en estado de ebriedad comenzaron a molestar a las damas que atendían al público. Más tarde Eduardo Loyola sostuvo intercambios verbales con los molestos asistentes, lo que fue subiendo de tono. La llegada de Carabineros no ayudo a bajar los ánimos. Lejos de eso, sirvió para autorizar la pelea. Comenzaron los golpes y en el desarrollo de la gresca, uno de contrincantes tomó una silla y trató de impactar con ella al guatón Loyola que había caído al suelo. La intervención de un amigo de Loyola, ayudó a que uno de los agresores huyera del lugar. Al llevarse una mano atrás para tomar un manojo de llaves, supusieron que extraería un arma”, comentó Benavente.


                          Una intensa campaña se ha iniciado en la comuna de Parral y que busca reivindicar el origen de la famosa cueca “Guatón Loyola” , incluyendo la necesidad de levantar un monumento en la medialuna de la tierra natal de “Pablo Neruda”.

Juan Carlos Benavente, un descendiente directo de uno de los testigos de la pelea, (Servando Benavente) dijo que jamás estos hechos se produjeron en “Los Andes” sino que en Parral. “Los hechos ocurrieron en Parral y por una mejor rima, se cambio por Los Andes”, dijo el parralino.

DATOS
Escrita en 1954 por Alejandro Gálvez Droguett, "el Flaco Galvez" la cueca relata lo ocurrido en Parral al ciudadano Eduardo Loyola Pérez; el “Guatón Loyola”. Loyola se vio envuelto en una pelea luego de participar en un rodeo en el fundo de Santiago Urrieta Benavente. En el lugar estuvo presente el propio autor de la cueca, el Flaco Gálvez quien era amigo del Guatón Loyola.

“Según el relato de los testigos, en el casino del lugar tres varones en estado de ebriedad comenzaron a molestar a las damas que atendían al público. Más tarde Eduardo Loyola sostuvo intercambios verbales con los molestos asistentes, lo que fue subiendo de tono. La llegada de Carabineros no ayudo a bajar los ánimos. Lejos de eso, sirvió para autorizar la pelea. Comenzaron los golpes y en el desarrollo de la gresca, uno de contrincantes tomó una silla y trató de impactar con ella al guatón Loyola que había caído al suelo. La intervención de un amigo de Loyola, ayudó a que uno de los agresores huyera del lugar. Al llevarse una mano atrás para tomar un manojo de llaves, supusieron que extraería un arma”, comentó Benavente.

Enseguida dijo que : “a contar de ese día, el "Guatón Loyola" se inmortalizaría a través de la creatividad musical del Flaco Gálvez. Incluso la primera vez que se escuchó la cueca, el propio Eduardo Loyola tuvo el honor de bailarla. En 1956, por motivos de mejor rima, el dúo folclórico “Los Perlas”,cambio la letra de Parral a Los Andes.

Finalmente dijo que : “en virtud de lo anterior estimamos que Parral requiere de un monolito que consagre el recuerdo de donde ocurrieron los hechos y una restitución histórica en el relato, toda vez que todo ocurrió en Parral y en su génesis la letra consignaba los hechos en Parral”.